Construido en el 2008 por los arquitectos Emiliano López y Mónica Rivera, en medio de un campo de cereal, muy cerca del parque natural de Las Bardenas Reales.
Construido en una sola planta, el hotel se integra perfectamente con el paisaje austero que lo rodea. Está formado por un conjunto de pequeños cubos repartidos por el terreno que aportan paz y silencio al entorno desértico.
Los espacios están organizados en torno a un patio central para protegerse del Cierzo que azota la zona principalmente en invierno y comienzos de la primavera.
Teniendo en cuenta que el presupuesto era escaso, los arquitectos econtraron una solución mediante el uso de prefabricados y una insólita combinación de alta tecnología industrial con elementos de aspecto humilde -cajas de madera recicladas- que cubren la fachada principal y que tanto han contribuido a mimetizarlo con el entorno.
Fotografías de Victor Lax
Eso del presupuesto escaso… tengo mis dudas.
Hola C,
¿Por qué tienes tus dudas acerca del presupuesto escaso?