MeeraSkyGarden_dym13

Aunque los techos verdes tienen una tradición de siglos en zonas rurales de toda Europa, especialmente en los países escandinavos, su uso en la arquitectura moderna comienza en territorio alemán durante la década de 1960.

Desde entonces, su popularidad ha ido en aumento debido a sus numerosas ventajas. Una buena cubierta vegetal reduce la contaminación urbana, ya que genera oxígeno y es un filtro natural de partículas y otros contaminantes presentes en el aire y la lluvia. Además, disminuye las variaciones de humedad y proporciona aislamiento térmico y acústico.

MeeraSkyGardenHouse8_dym14

Meera Sky Garden House, en Singapur (Guz Architects) es un claro ejemplo de ello. Aquí se riza el rizo y cada tejado verde sirve de base a una nueva planta, con lo que la casa queda totalmente integrada entre jardines escalonados. Pura exuberancia vegetal.

8House_StudioBIG_dym02

8House_StudioBIG_dym03

Existen otros ejemplos de uso realmente llamativos, como la 8 House (Estudio BIG), una construcción atípica concebida para dinamizar el sur de Orestad, en Copenhague. Sus 1.700 m2 de cubierta verde en dos planos diagonales ascendentes disipan el exceso de calor en días soleados.

AcademiaCCSanFrancisco_dym04

AcademiaCCSanFrancisco_dym05

Otra buena muestra de aplicación de este concepto ecológico es la Academia de Ciencia de San Francisco (Renzo Piano). Aquí, un enorme techo verde de unos 10.000 m2, con grandes cúpulas plagadas de claraboyas circulares, proporciona iluminación y se integra en el Golden Park que rodea al museo. Su vegetación nativa californiana resiste bien las altas temperaturas, por lo que se puede minimizar el agua de riego. Así mismo, atrae a pájaros, mariposas e insectos, con lo que aumenta la biodiversidad local.

UniversidadTecnologicaNanyang_dym06

UniversidadTecnologicaNanyang_dym07

En otros casos prima el efecto estético rompedor, como en la Universidad Tecnológica de Nanyang (CPG Consultants) en Singapur, cuyos tejados son praderas de césped por las que se puede pasear, ascendiendo por un extremo y bajando por el opuesto, como si fuesen colinas naturales. Tres espectaculares rampas curvas que mimetizan y casi ocultan el edificio con el paisaje.

InstitutoTecnicoMarcelSembat_dym08

InstitutoTecnicoMarcelSembat_dym09

En esta misma línea podemos incluir también la rehabilitación del instituto técnico francés Marcel Sembat (Archi5 + B Huidobro), situado junto a un área forestal en la región de Alta Normandía. Sus techos verdes ondulados sobre una base de vigas y planchas de acero -que soportan el peso de 8.000 m2 de vegetación- sirven de regulador térmico y barrera acústica, al tiempo que aportan continuidad y potencia al entorno.

GreenTechnologyShowroomPekin_dym10

GreenTechnologyShowroomPekin_dym11

A veces, la envoltura vegetal se desliza también por las paredes del edificio. Es el caso de la sala temporal de exposiciones Guanganmen Green Technology Showroom (Vector Architects) de Pekín, que absorbe el agua y reduce la escorrentía tras la lluvia, con un efecto visual notable.

RockefellerCenterGardenRoof_dym 12

Mención aparte merecen los impecables jardines de varias de las azoteas del Rockefeller Center de Nueva York. Creados por el paisajista Ralph Hancock en los años 30, la mezcla de arbustos, setos, flores, césped y fuentes eleva a cotas muy altas otra de las ventajas de los tejados ajardinados: su valor ornamental y estético.

Imágenes cortesía Jens Lindhe, BIG – Bjarke Ingels Group, Tim Griffith, Academia de las CC. de CaliforniaUniversidad Tecnológica de Nanyang, Thomas Jorion, Sergio GraziaVector ArchitectsGuz Architects.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *