La Aru House, diseñada por Curious Practice, es un proyecto que destaca por su sensibilidad y respeto hacia el entorno natural, así como por su enfoque en la simplicidad y la funcionalidad. Ubicada en Newcastle, Australia, esta vivienda unifamiliar encarna una conexión íntima con el paisaje que la rodea, creando un espacio de vida que es a la vez refugio y celebración de la naturaleza.

El por qué de los materiales naturales

Desde su concepción, la Aru House se ha centrado en maximizar la relación entre el interior y el exterior. El diseño utiliza una paleta de materiales naturales, como la madera y el ladrillo, que no solo se integran visualmente en el paisaje, sino que también aportan calidez y textura a los espacios interiores. Estos materiales son seleccionados no solo por su estética, sino también por su durabilidad y capacidad para envejecer con dignidad y belleza, reflejando el paso del tiempo de manera orgánica.

En torno al patio

La estructura de la casa es sencilla a la vez que ingeniosa, organizada en torno a un patio central que actúa como corazón de la vivienda. Este patio no solo permite una abundante entrada de luz natural, sino que también facilita la ventilación cruzada, contribuyendo a la eficiencia energética de la casa. La disposición de los espacios alrededor del patio asegura que cada habitación tenga una conexión directa con el exterior, permitiendo a los habitantes disfrutar de la vegetación circundante desde cualquier punto de la casa.

Pasive house

Un aspecto notable del diseño es cómo la Aru House responde al clima local. Los arquitectos han tenido en cuenta la orientación solar y los vientos predominantes, optimizando el rendimiento térmico de la vivienda sin necesidad de recurrir a soluciones tecnológicas complejas. Las amplias aberturas y las persianas ajustables permiten controlar la cantidad de luz y calor que entra, creando un ambiente interior agradable durante todo el año.

El enfoque de Curious Practice en la sostenibilidad se refleja no solo en la selección de materiales y en el diseño pasivo, sino también en la escala del proyecto. La Aru House es modesta en tamaño, evitando el exceso de metros cuadrados innecesarios y demostrando que la calidad del espacio no depende de la cantidad, sino de su organización y su relación con el entorno. Esta economía de medios no solo reduce el impacto ambiental de la construcción, sino que también promueve un estilo de vida más simple y consciente.

Aru House destaca cómo la arquitectura puede ser tanto una respuesta funcional a las necesidades del día a día como una expresión poética de la relación entre el ser humano y su entorno. Es una vivienda que, sin pretensiones, logra una armonía entre diseño, sostenibilidad y belleza, invitando a sus habitantes a vivir de manera más conectada con la naturaleza y con los ritmos del mundo exterior​.

 

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